El municipio de Moreno, situado en la región de Recife, estado de Pernambuco (Brasil), abastece agua a más de 44.000 habitantes a través del río Jaboatao. Su captación se lleva a cabo en la Estación de Tratamiento de Agua (ETA), que recoge agua del río y la transforma en apta para el consumo.
Como el agua de este río es muy turbia, para conseguir que tenga una buena calidad debe pasar por un proceso de coagulación que elimine los sólidos en suspensión. Después de este proceso, el agua debe someterse a la fase de cloración, mediante la cual se desinfecta y potabiliza.
En este segundo punto, el de cloración, la compañía gestora de aguas de la zona (COMPESA) no detecta problemas de eficiencia del proceso, por lo que decide que se debe actuar en el proceso de coagulación, ya que se observa una baja eficiencia en la disolución del coagulante sulfato de alúmina.
Después de estudiar el caso, se evidencia que los agitadores utilizados no funcionan correctamente y necesitan un largo periodo de agitación para poder dejar la disolución del coagulante lista para ser dosificada. Además de los problemas en la preparación del sulfato de alúmina, tienen un elevado consumo de coagulante debido a deficiencias en el diseño de la instalación que produce una sobredosificación de producto.
Una vez estudiado el caso, desde ITC y el distribuidor local FluidFeeder se proponen dos modificaciones a su sistema de potabilización del agua:
Con estos cambios se consigue reducir el tiempo de agitado y mejorar la calidad de la disolución del sulfato de alúmina, así como reducir el consumo de coagulante gracias a una dosificación precisa.
El éxito conseguido en el sistema de potabilización del agua en la Estación de Tratamiento de Moreno, ha llevado a ITC y Fluidfeeder a realizar actuaciones similares en otras estaciones de tratamiento del estado de Pernambuco.