La multinacional Nestlé tiene una planta en Senegal con 400 trabajadores donde fabrica los populares cubos de Maggi. A estos trabajadores se les debe proporcionar agua potable para poder cubrir sus necesidades y garantizar unas óptimas condiciones de trabajo y de seguridad. Para ello, Nestlé realiza análisis periódicos del nivel de cloro en la red de suministro de agua y en sus 70 puntos de agua distribuidos por toda la fábrica.
Una vez realizados estos análisis, se evidencia que la red de abastecimiento que suministra agua a la planta tiene unos niveles de cloro muy variables, con oscilaciones que van desde valores muy altos de cloro a casi inexistentes.
Ante esta situación, y después de probar con una dosificación proporcional a la entrada de agua que ocasiona sobrecloraciones, se llega a la conclusión que la única manera de conseguir un nivel adecuado de cloro dentro de la fábrica es a través de correcciones manuales, en función del nivel de cloro en la entrada.
Es en este momento, cuando Nestlé confía en Aqua’Tec para proponer una solución a este problema.
En las instalaciones de la fábrica de Nestlé existen dos depósitos de almacenamiento de agua: uno de 250 m3, que también alimenta el circuito de incendios, y otro de 150 m3 desde el que se distribuye el agua dentro de las instalaciones. Ante la existencia de estos dos tanques, se propone hacer un pretratamiento en el primero y un tratamiento final en el segundo, desde donde se distribuirá el agua a los 70 puntos de consumo.
Teniendo en cuenta la variación que hay en los niveles de cloro, el pretratamiento se plantea con una lectura inicial del cloro en la entrada a través de un equipo de medición Redox, combinado con una dosificación proporcional al caudal de agua de suministro. De esta manera, cuando los niveles de cloro del agua de suministro son demasiado elevados, el controlador Redox para automáticamente la dosificación proporcional.
En el tanque de tratamiento se instala una recirculación de 40m3/h (caudal suficiente para mantener el valor de cloro libre deseado sin oscilaciones, según el consumo de agua existente) sobre la que se hace lectura y corrección del nivel de cloro libre para dejarlo ajustado a 0,3 ppm, y así cumplir con las directrices marcadas por Nestlé.