El riego por aspersión es uno de los sistemas de riego automatizados más utilizados en la agricultura debido a su capacidad para cubrir grandes áreas.
En las últimas décadas, se ha convertido en una herramienta esencial en la agricultura moderna, puesto que es capaz de ofrecer una manera eficiente de suministrar agua a los cultivos. No obstante, es posible optimizar aún más su funcionamiento mediante equipos de fertirrigación que ayuden a reducir costes en los recursos y mejoren la rentabilidad de las operaciones agrícolas.
En este artículo descubriremos las ventajas de este tipo de riego, sus componentes clave y cómo se puede optimizar aún más su funcionamiento con la ayuda de ITC.
El sistema de riego por aspersión cuenta con una serie de ventajas para el agricultor y su cultivo. Por ejemplo, se adapta fácilmente a las dosis de riego necesarias, tiene una automatización sencilla y permite el tratamiento con fertilizantes, fitosanitarios y tratamientos anti-helada.
Se trata de un sistema de riego realmente flexible tanto en diferentes tipos de cultivo como en diversos terrenos. Además, su capacidad para proporcionar riego a extensas áreas y su uniformidad en la distribución del agua hacen que sea el método ideal para mantener grandes cultivos en buen estado.
Por otra parte, es fundamental destacar que el riego por aspersión es uno de los sistemas que permite contribuir a un uso más eficiente del agua y a una mayor productividad, en comparación con otros métodos de riego.
En cuanto a las partes esenciales del sistema de riego por aspersión, cabe mencionar los aspersores, que distribuyen de manera uniforme el agua sobre el terreno.
Las tuberías, por su parte, son las responsables de transportar el agua hasta los aspersores, mientras que los controladores se ocupan de encender y apagar las bombas que aplican el fertilizante, y los agitadores mezclan homogéneamente los componentes líquidos. Cabe destacar que, en ocasiones, se utilizan programadores, en vez de controladores, que también se ocupan del riego.
Como se ha mencionado anteriormente, es posible optimizar el sistema de riego por aspersión para controlar el uso del agua y garantizar un crecimiento saludable de las plantas.
Existen diversas estrategias para mejorar la eficiencia del riego por aspersión, por ejemplo, la fertirrigación, es decir, la dosificación precisa de fertilizantes a través de bombas dosificadoras como las que encontrarás en el catálogo de ITC, o la quimigación.
Nuestras bombas dosificadoras se caracterizan por administrar con precisión la cantidad necesaria de producto y mejorar el aprovechamiento del agua, la energía y los fertilizantes. La fertirrigación en sistemas de riego por aspersión permiten una reducción de los daños mecánicos en el cultivo.
Estas mejoras no solo permitirán que tus cultivos sean más productivos y rentables, sino que contribuirán a un riego más sostenible y respetuoso con el medio ambiente al usar de manera responsable los recursos naturales.
Son muchos los beneficios económicos y ambientales de un riego por aspersión correctamente diseñado.
Si deseas implementar soluciones y equipos de fertirrigación que mejoren el riego por aspersión de tu cultivo, no dudes en contactar con ITC.